SI, SI, SI, LA ELA YA ESTÁ AQUÍ

Estamos de enhorabuena: por fin tenemos Entidad Local Autónoma. En el Pleno celebrado hoy, el ayuntamiento de Albuñol ha aprobado, por mayoría absoluta, la creación de la Entidad Local Autónoma de La Rábita, y su Estatuto Regulador. De los 12 concejales presentes, el resultado ha sido de 7 votos a favor y 5 en contra: A Favor (1 PILR, 1 Mixto, 1 CA y 4 PSOE). En Contra ha votado el PP y una concejal de CA.

No vamos a darle mayor protagonismo a las descalificaciones e insultos que el PP, en boca del alcalde y de su irrespetuosa portavoz, ha lanzado contra La Rábita y los rabiteños. Han dicho –literalmente- que esa pedanía o barrio de cuatro casas de pescadores no  merecía la ELA. Nos han insultado y les ha salido la vena de señoricos caciques que no quieren perder un trozo de su cortijo.

Tras los trámites de información pública y de remisión de informes por parte de la Junta de Andalucía y de la Diputación Provincial, se procederá durante 2014 a la constitución de la Entidad Local Autónoma de La Rábita. En las próximas fechas  iremos danto más detalles de la ELA.

En el Partido Independiente nos sentimos especialmente orgullosos de haber hecho que este sueño se haga realidad. Al final la lucha ha merecido la pena. Muchas gracias a todos los vecinos que lo han hecho posible, con su voto, con su firma, con su apoyo, manteniendo viva la ilusión incluso en los momentos más difíciles. Y un recuerdo a los que se fueron sin poderla disfrutar.

Hoy se ha producido el triunfo del pueblo. Queda mucho trabajo por delante, pero otra Rábita mejor empieza ahora.  ¡¡Feliz año nuevo. Feliz ELA nueva!!

Todos somos el Rayo Rabiteño

Contemplamos perplejos en los últimos días, como el alcalde de Albuñol le niega a nuestros niños y jóvenes del Rayo Rabiteño que utilicen las instalaciones municipales. Ya es una vergüenza intolerable, que por ser de La Rábita, no tengan ninguna ayuda pública, de la que si disponen los equipos del pueblo de Albuñol. Y además, es que el Sr. alcalde no tiene derecho a negarle la utilización del campo de fútbol a los chavales, porque no es suyo, sino de todos los vecinos.

 

El abuso de poder, el despotismo y el odio a los rabiteños de este hombre ha llegado al extremo. Queremos que desaparezca de la política ya. No nos merecemos tanto desprecio, y tanto caciquismo. Es el colmo, a una larga lista de agravios hacia todos los que no le bailan el agua, como la banda de cornetas y tambores, a La Rábita CF, exposición fotográfica vecinal, etc. Y es que en La Rábita, para su desgracia, le hemos salido rebeldes.

 

Hay muchos comentarios sobre qué se podría hacer para acabar con este “régimen”. La postura del Partido Independiente es clara: apoyaríamos una moción de censura de unidad municipal y basada en unos acuerdos programáticos, para por lo menos sacar adelante en lo que queda de legislatura algunos proyectos.

 

¿Y por qué no se hace? Desde luego, no porque el PILR no lo quiera, sino porque -es importante volver a recordarlo- somos todos rehenes de Convergencia Andaluza (CA), sin cuyo apoyo (al menos de una de sus concejalas, y una de ellas es rabiteña) la moción es imposible. Recordemos que CA es quién aupó a este hombre al gobierno, con un pacto increíble en el que se repartían cargos y sueldos, traicionando a las primeras de cambio todas esas promesas de regeneración democrática que nos vendieron. Menudo fraude.

 

Ahora tenemos la herencia que nos dejaron, y que no les da la gana quitar. Dicen que estarían a favor de una moción, pero imponiendo ellos el candidato del PSOE. Eso, nos guste más o menos la candidata de ese partido, es inaceptable. Cada partido es soberano para elegir sus representantes y, además, fue la que se presentó a  las elecciones. Es otra artimaña más.

 

Y así estamos, presos de malos gobernantes de estilo caciquil, y de personajes que anteponen sus odios e intereses personales, al interés general del pueblo. El Partido Independiente somos distintos. Queremos el cambio. Queremos lo que debería ser normal, pero por desgracia no lo es: transparencia y política al servicio y al beneficio del pueblo, de todos los vecinos por igual. El gobierno del Pueblo.

El alcalde de Albuñol nos impone un monumento fúnebre en el Paseo Marítimo

Que pena que en nuestro pueblo nunca se hace nada, y cuando se hace algo, se hace mal. Es lo que ha sucedido con el monumento que el Sr. Alcalde (Juan María Rivas, PP) nos ha colocado en el Paseo Marítimo.

Vaya por delante nuestro respeto por las victimas y el cariño a los familiares y a todos los que sufrieron aquella terrible tragedia de La Nube, hace 40 años. Pero el Paseo Marítimo no es un lugar para un monumento fúnebre, sino un lugar de ocio y diversión.

Menudo mal gusto. Y encima hecho por imposición y sin tener en cuenta la opinión de nadie. Tan mal sabe que lo ha hecho, que hasta mandó custodiarlo día y noche antes de su inauguración por la policía municipal, por ciento, con un importante gasto económico para todos.

Es un personaje autoritario y chapado a la antigua, y ha hecho todo lo posible para estampar su nombre en un monumento, poner la bandera y hacerse las fotos de rigor.

Y todo de espaldas a los vecinos, como siempre, que lo rechazan de manera generalizada. No es el sitio para un monumento fúnebre. Y encima tapando la reproducción de la Torre, lo único bonito que había. Peor imposible.

Rechazamos el monumento, y las formas de este alcalde y su equipo de gobierno, que actúa por imposición y de manera antidemocrática. De igual modo, no ha informado para nada del resto de las obras que se supone se van a acometer en el Paseo Marítimo. Se le ha pedido reiteradamente información, pero no la da. Será, una vez más, lo que le de la gana.

Nosotros exigimos que estas lápidas sean trasladadas cuanto antes al cementerio, en el lugar más adecuado, y que allí recuerden a las víctimas. Y por supuesto queremos un cambio profundo en la manera de gobernar y hacer política, para que los políticos sean verdaderos representantes de los ciudadanos y no gobiernen en su contra.

"La Rábita, el garbanzo negro del municipio"

En el último pleno de septiembre se constata la degradación absoluta de la política municipal. Un alcalde que ha secuestrado el debate democrático en los plenos, y que no cumple lo que en ellos se aprueba. Recordemos que ese órgano debería representar a la ciudadanía, a la voluntad popular. Pero este se la pasa por el forro.

 

En cambio la institución municipal se ha convertido en un circo, en un esperpento de pitidos, amenazas, autoritarismo y acusaciones mutuas. Una vergüenza, que el PILR denuncia y de la que no quiere formar parte.

 

Se constata que estamos ante el alcalde más clasista y centralista de la historia. Aunque en esto todos los alcaldes albuñoleros han sido siempre igual. Él tiene claro que no todos somos iguales, y que los que no vivimos en Albuñol somos ciudadanos de segunda, barrios periféricos de la gran capital.

 

Un ejemplo fue el pretendido “puente de Los Castillas”, que en realidad lo quiere hacer en frente de Albuñol. Es de locos. Si alguien de Los Castillas quiere ir a echar gasolina, ir a la playa o salir a la carretera general, tiene primero que desviarse y pasar por la gran todopoderosa capital del municipio. Por suerte la propuesta se rechazó (PILR, PSOE y mixto en contra; PP y CA a favor), porque además suponía destinar toda la inversión municipal durante los próximos cuatro años a este sólo proyecto.

 

Y ya se ha quitado la careta. En el pleno el alcalde afirmó: “que ya está harto de La Rábita, que es el garbanzo negro del municipio”. Increíble, pero cierto. Estará molesto porque se le recrimine que no arregla las farolas desde hace ya años, o el Canal Sur, o los baches de las calles, o las basuras, o que dé dinero a todos los equipos de fútbol de Albuñol, pero no a los de La Rábita  por el simple hecho de no llamarse Albuñol; de ir en contra del grupo local de cornetas y tambores, de la asociación de mujeres, de la exposición fotográfica, de decir que el campo de fútbol en La Rábita es una utopía irrealizable, de no poner ni una simple luz en las fiestas, etc., etc., etc.

 

En el grupo independiente somos conscientes de todos estos problemas y luchamos para resolverlos desde siempre. Pero somos 1 de 13 y nuestras mociones, a pesar de estar aprobadas, no se cumplen. Antes, sin necesidad de trámite previo alguno, se hacen pistas de pádel en Albuñol.

 

Trabajamos para que cada vez más vecinos se den cuenta de esta realidad y reivindiquen lo que todos nos merecemos: igualdad de derechos, de servicios y de oportunidades, y unos representantes políticos que cumplan sus compromisos y trabajen al servicio de los ciudadanos y no por los intereses partidistas. Los resultados no dependen de nosotros, pero tenemos la satisfacción de que todo lo que hacemos es para que gane el pueblo.

Recuperar los valores

Vivimos tiempos en los que se están perdiendo, sino se han perdido ya, nuestros valores fundamentales. Por el contrario, nuestra sociedad vive en la envidia, el egoísmo y la mediocridad, contagiando a una clase política corrupta y mezquina.

Los grandes partidos políticos han creado un monstruo, caracterizado por el bipartidismo, la corrupción, la prevaricación, y el sectarismo, que ha echado ha perder la democracia real. Los grandes partidos ya no están preocupados por el pueblo y en atender las necesidades de la sociedad, sino por mantenerse a toda costa en el poder. El partido es ahora lo primero, y el sistema establecido arrasa con cualquier intento reformador.

En nuestro querido pueblo pasa lo mismo. Seguramente, su situación de abandono, dependencia y atraso es fiel imagen de la mayoría de su sociedad. Sobran envidiosos, mediocres y personas vacías que se mueven al son que más les conviene.

Pero aunque para ellos les sea imposible de creer, todavía hay personas comprometidas y con valores, que trabajan por el bien de la comunidad. Estos somos el Partido Independiente de La Rábita. No somos perfectos, ni los mas simpáticos, ni los mas guapos, ni carentes de muchos defectos, pero somos independientes. Independientes de la corrupción, de la falta de valores, de la falta de compromiso con el pueblo, de la desigualdad y de la dictadura que nos imponen esos grandes partidos políticos.

La demostración es una lucha continua durante ya 20 años de un grupo de vecinos que en lugar de criticar, de venderse al mejor postor, y de no hacer nada, al menos se revelan contra el atraso, el sectarismo, la mediocridad y el trato injusto al que nos someten y siempre nos han sometido desde Albuñol. Y da igual qué partido político sea. Nos revelamos contra los que quieren tratarnos como a ciudadanos de segunda.

Y seguimos en esta lucha desigual, de un modesto grupo de vecinos frente a la poderosa maquinaria de los partidos, porque nuestra satisfacción no está en las victorias electorales ni en los réditos que otros pretenden conseguir metiéndose en política. Nuestra satisfacción está en luchar por nuestro pueblo –por nosotros mismos- y por lo que creemos que es justo. Creemos en una democracia real, en el gobierno del pueblo, en la igualdad con independencia de donde se viva, en el respeto y en recuperar esos valores ahora decadentes que nos han permitido crear la sociedad del bienestar que ahora esta en peligro.

 

Nosotros, al menos, ponemos nuestro granito de arena.

Juan María Rivas (PP) impone su dictadura en el ayuntamiento

La actuación del actual alcalde está llegando a límites antidemocráticos difícilmente soportables. La demostración la tuvimos en este ultimo pleno celebrado el 31 de enero de 2013, en el que por imposición, no aceptó incluir en el orden del día las mociones del Partido Independiente de La Rábita (P.I.L.R.), ni la mayoría de las del PSOE.

Con ello se perpetra una especie de secuestro de la más pura democracia, aquella que permite expresarse y hacer propuestas a los legítimos representantes del pueblo, que son los concejales en este caso. El Pleno terminó cuando todos los concejales de la oposición se fueron.

Las mociones del PILR que el Sr. Juan María no vio conveniente debatir fueron las siguientes:

1.- Solicitar a la Dirección General de Costas la regeneración urgente de la Playa de La Rábita; y llevar a cabo la reparación de los destrozos causados por el temporal en las duchas, farolas y palmeras.

2.- Moción municipal de rechazo a los desahucios:

El Ayuntamiento de Albuñol rechaza los desahucios de personas y familias sin recursos, que por haber empeorado su situación económica o laboral, se vayan a ver forzadas a perder su única vivienda habitual.

El Ayuntamiento de Albuñol acuerda intervenir en posibles situaciones de desahucio en el municipio como mediador, para encontrar una solución satisfactoria que evite el desahucio.

En caso de manifiesta intransigencia por parte de las entidades bancarias, el ayuntamiento podrá acordar la retirada de los fondos económicos con que contase en el banco, entre otras medidas.

3.- Llevar a cabo de inmediato la retirada de escombros en los terrenos públicos situados bajo el Castillo de La Rábita y el entorno del Polideportivo (dándoles un tratamiento adecuado), y proceder a la limpieza y adecentamiento de estos terrenos municipales.

Propuestas todas ellas más que oportunas y sensibles con las necesidades del pueblo y de sus vecinos que, por cierto, son las que el PILR presenta en todos los plenos. Pues bien, estas y otras mociones y preguntas fueron rechazadas por el señor alcalde, sin mayor explicación. No tuvo, siquiera, una sola palabra respecto a los daños del temporal y su arreglo.

El Sr. Juan María Rivas ha perdido el norte, que es gestionar (que no mandar) el ayuntamiento para ayudar a los vecinos y resolver sus problemas y necesidades. Con sólo cuatro concejales, está en el ordeno y mando, coartando la libertad de expresión y la democracia.

La solución es que se vaya. La alternativa que defendemos es la de un gobierno municipal de unidad, sobre la base de unos acuerdos sobre proyectos y actuaciones prioritarias a realizar en estos dos años que faltan de legislatura. Sin personalismos, ni partidismos. Sólo por y para el pueblo. Y cuando lleguen las elecciones que cada uno haga su campaña. Eso sería dar ejemplo a la ciudadanía de que se está por ellos y no por otras cosas. El PILR está dispuesto a ello. 

Lo único que falta es que a La Rábita se la lleve la mar

Efectos del temporal en la playa de La Rábita

Alguno con sorna -y puede que con algo de mala leche- dice que lo que le faltaba ya a La Rábita es que se la lleve la mar. En otro momento también pudo decir que se la llevara la Rambla. Y debido a la dejadez y la decadencia en la que nos tienen sumidos desde tiempo inmemorial, tanto una cosa como la otra podrían ser verdad. Lo comprobamos con los graves efectos que el temporal está dejando en nuestro litoral.

Un temporal que ni ha sido el primero, ni será el último. Lo que no cambia es la desidia y el abandono a que nos someten los sucesivos gobernantes de Albuñol, que un año sí, y otro también, guardan en el cajón del olvido el proyecto de costas. Un proyecto de protección y regeneración del litoral que es el presente y el futuro para La Rábita.

Un visitante de Castilla se espantaba horrorizado de ver tantos kilómetros de costa ocupados ilegalmente y llenos de basura. “Mi pueblo daría cofres llenos de oro por poder tener un trozo de playa, y aquí la tenéis hecha un vertedero”, dijo. Cualquiera con dos dedos de frente comprende la riqueza y el potencial que suponen las playas, la industria nacional número uno. Por no hablar ya del incalculable valor que posee en sí mismo el medio ambiente, y el uso y disfrute para todos de nuestra costa.

Sin embargo, Albuñol no tiene playa, o así actúan. Cosas así sólo pueden pasar aquí. Hemos salido en la tele por ser la playa (o mejor dicho, la no-playa) más sucia de Europa. Salimos en los periódicos por ser una playa “tóxica”, y todos los años nos ponen una bandera negra. Y a los politicuchos de turno no se les cae la cara de vergüenza. Todo lo contrario, el proyecto en el cajón, y a callar. Y desde hace mucho, demasiado tiempo.

Mientras tanto, los temporales se llevan la arena de la playa y saltan al paseo marítimo. ¿De quien es la culpa? De los politicuchos y gobernantes de Albuñol sí, pero detrás de ellos hay muchos -demasiados- vecinos de La Rábita que los apoyan y los siguen. Los que votan y siguen al PP deben saber que apoyan a un alcalde que está en contra del proyecto de protección de nuestra  costa, y que ha guardado el proyecto en el cajón. Los que votan y siguen al PSOE, deben saber que gobernaron más de una década, en la que al final no hicieron nada, más bien entorpecer el proyecto, y ahora tampoco lo hacen. El Partido Independiente lleva luchando desde siempre por el proyecto -ahí se pueden ver las mociones y propuestas presentadas- pero los rabiteños sólo le han dado uno de cinco concejales que se eligen en La Rábita. Aunque eso no nos detiene en nuestra justa lucha.

¿Cuánto más se tiene que hundir el pueblo para que los rabiteños reaccionen? Sólo la unión de todos los rabiteños traerá la prosperidad y el futuro.

¡Unidos, ganaremos el futuro!

¡Proyecto de Costas ya!

PILR